¿Qué es el túnel carpiano?

La mano humana es una herramienta impresionante. ¿Alguna vez te has parado a pensar cuántos huesos, músculos, nervios y ligamentos están trabajando coordinados en tu mano?

Fíjate en tu mano: puedes rotarla gracias a la articulación del codo, puedes flexionarla o extenderla gracias a la muñeca, puedes abrirla o cerrarla, hacer la palma más convexa o cóncava, puedes mover cada dedo en rotación, abrirlo o cerrarlo. ¿Cómo es posible todo este movimiento y con un control tan preciso? 

El ligamento transverso, el túnel carpiano y el nervio medio

La articulación de la muñeca conecta muchos huesos diferentes. Del antebrazo llegan el cúbito y el radio, que son los que permiten la rotación por su articulación en el codo, y se unen a un conjunto de huesos pequeños que forman el carpo de la mano. Este conjunto de huesos crea una estructura semicircular que está cerrada, por la parte de la palma de la mano, por lo que se conoce como el ligamento transverso.

Se crea ahí un túnel anatómico formado, por la parte de la palma, por el propio ligamento transverso, y, por la parte del dorso, por el conjunto de los huesos del carpo. Por este túnel, que es bastante pequeño, tienen que cruzar nueve tendones que permiten la movilidad de la mano, y el nervio medio.

Y la estructura se viene abajo

Desgraciadamente, por diversos factores, esta estructura que hemos visto puede sufrir modificaciones. Puede ser que el ligamento transverso se vuelva rígido, o que se vuelva laxo; puede ocurrir que la estructura del carpo pierda movilidad; o puede ser que diferentes tejidos del propio túnel se inflamen. Estas modificaciones derivan en que el túnel pierde su forma y, tanto los nueve tendones como el nervio medio pueden verse comprimidos.

La compresión del nervio medio a la altura del túnel carpiano explica los síntomas propios del síndrome del túnel carpiano. 

Es una patología muy habitual, pero mucho más en…

Es curioso que una patología así se cebe especialmente con las mujeres. La prevalencia en los hombres es del 0,6%, y en mujeres del 5,8%. Es difícil explicar este hecho, pero es así. 

El origen de la enfermedad también es difícil de explicar. Aunque hay tres teorías, todas ellas terminan con la sobrepresión sobre el nervio medio, ya sea por problemas de microcirculación, por una vibración excesiva en la articulación o por la presión mecánica sobre el túnel. En muchos casos se puede identificar un patrón de movimientos repetitivos en la muñeca que parecen favorecer la aparición de la patología.

Síntomas y signos

Casi siempre la enfermedad comienza igual. A continuación te describo los síntomas en el orden que suelen aparecer:

• Dolor con sensación de quemazón que despierta al paciente en mitad de la noche que mejora agitando la mano o apoyándola en el borde de la cama.
• Disminución de la sensibilidad.
• Debilidad y torpeza, especialmente por la noche.
• De forma tardía pueden aparecer atrofia de la musculatura que lleva a la falta de sensibilidad al cerrar la mano. En muchas ocasiones el paciente no se da cuenta hasta que compara las dos manos.

¿Qué se puede hacer?

Hay dos caminos. Lo normal es agotar el primero antes de llegar al segundo.

Tratamiento no quirúrgico:

• Muchos pacientes notan una gran mejoría utilizando prótesis, como muñequeras especialmente diseñadas para este problema que logran aliviar la sobrepresión en el túnel carpiano. Pueden usarse tanto de día como de noche.
• Cuando se trata de una inflamación temporal se pueden usar antiinflamatorios, tanto en forma de cremas como por vía oral.
• Los pacientes que hacen de estiramientos bien definidos también presentan mejoría.
• El yoga y el fortalecimiento de la zona también han demostrado eficacia a corto y medio plazo.

Tratamiento quirúrgico:

• Básicamente se aumenta el tamaño del túnel carpiano cortando las estructuras que haga falta. Existen técnicas poco invasivas por endoscopia que tienen resultados similares las tradicionales.

Si tienes alguno de estos síntomas…

Si tienes alguno de estos síntomas acude a tu farmacia. Podemos recomendarte una muñequera que alivie tus molestias y recomendarte un tratamiento antiinflamatorio en función de tus necesidades. Además, sabremos recomendarte que acudas a un especialista si es necesario. Tu farmacéutico, el tuyo, el que tienes cerca de casa, es un profesional sanitario preparado para atenderte y está dispuesto a ayudarte.