La Diabetes Mellitus
Es un conjunto de enfermedades crónicas que se caracterizan porque los niveles de azúcar en la sangre están elevados y esto tiene consecuencias a corto, medio y largo plazo. Los niveles alterados se deben a que nuestro organismo no produce suficiente insulina o porque no actúa adecuadamente.
Los niveles altos de azúcar en sangre
A corto plazo una hiperglucemia puntual pueden producir mareos, desmayos e incluso inducir un coma.
A medio y largo plazo tienen un efecto tóxico porque daña diferentes tejidos. Son especialmente sensibles los ojos, los riñones, la piel, los nervios y el cerebro.
También tiene efecto sobre el colesterol, aumentando drásticamente el riesgo de padecer un evento cardiovascular.
Señales de alarma de la Diabetes Mellitus
Tener mucha sed y aumento en la micción, estar muy cansado y con poca energía, perder peso sin explicación aparente, visión borrosa transitoria, curación lenta de heridas e infecciones frecuentes, hormigueo y pérdida de sensibilidad en manos y pies, inflamación de las encías.
Ante estos síntomas se debe de consultar con el médico para que valore la situación.
Tratamiento de la Diabetes Mellitus
Es importante el diagnóstico precoz para iniciar lo antes posible el tratamiento más adecuado, este dependerá del tipo de diabetes y de las características del paciente.
El objetivo del tratamiento es controlar los niveles de azúcar, los síntomas y evitar la aparición de complicaciones.
Además del tratamiento farmacológico son esenciales la dieta y ejercicio.
La complicación más frecuente es la bajada de azúcar
Es importante conocer los síntomas de la hipoglucemia que suelen aparecer de manera repentina: sudoración fría, debilidad y temblor, visión borrosa, hambre, palidez…
Y suele estar producida por: ayuno prolongado, ejercicio físico intenso, tratamiento intensivo con insulina o algunos fármacos para la Diabetes Mellitus o por enfermedad renal o hepática grave.
Recomendaciones para los pacientes con Diabetes Mellitus
Los pacientes deben de seguir un estilo de vida saludable realizando ejercicio de manera frecuente y siguiendo las recomendaciones acordadas con el médico, tomando la medicación según la pauta prescrita y teniendo un buen conocimiento y manejo de su tratamiento, especialmente de los dispositivos de insulina.
Deben de prestar especial interés al cuidado de los pies para evitar el pie diabético, también las encías y realizar las revisiones médicas pertinentes: oftalmólogo, cardiólogo… para prevenir y tener controladas las posibles complicaciones.
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