Las úlceras por presión o escaras son lesiones en la piel y los tejidos subyacentes resultado de una presión continua y mantenida en una zona determinada del cuerpo.

Úlceras por presión: más allá de la superficie

Las úlceras por presión son comunes en personas con limitada capacidad para cambiar de posición, por ejemplo en el caso de personas mayores que pasan mucho tiempo en cama o en el sillón.

Aparecen en las zonas de contacto entre un saliente óseo y la superficie sobre la que se apoya el cuerpo, esta presión termina provocando un bloqueo del riego sanguíneo en la zona y posteriormente la ulceración.

¿Dónde se desarrollan principalmente las úlceras?

Las localizaciones más frecuentes son la zona sacra (parte inferior de la columna vertebral), los talones y las caderas.

Las úlceras por presión tienen una importante repercusión a nivel de la calidad de vida de los pacientes y necesitan una especial atención y cuidados.

Un número importante de úlceras pueden evitarse con los cuidados necesarios.

¿Cómo podemos prevenir las úlceras? Estrategias diarias para evitar úlceras

Realizando a diario un examen de la piel aprovechando el aseo diario fijándose sobre todo en las zonas de riesgo, para detectar precozmente su inicio.

Manteniendo una adecuada hidratación de la piel con un producto adecuado como puede ser una crema hidratante o un aceite con ácidos grasos hiperoxigenados.

Teniendo una adecuada higiene con agua tibia y productos con pH neutro, realizando un buen aclarado sin frotar y haciendo hincapié en las zonas de los pliegues.

Evitando el apoyo cuando la zona esté enrojecida

Evitando el exceso de humedad, los materiales sintéticos y la fricción.

Es importante realizar cambios posturales para conseguir disminuir la presión y evitar que se produzca una lesión.

En pacientes encamados cuando el paciente no es capaz de cambiar solo de posición se realizará el cambio de postura cada 2-3 horas.

Reduciendo la presión para una vida sin úlceras

En la actualidad existen muchos productos de ayuda para reducir la presión como son cojines con diferentes formas y materiales, colchones antiescaras, coderas, muñequeras, botas… que tienen como objetivo evitar la aparición de úlceras en pacientes que puedan tener más riesgo de presentarlas.

La alimentación será variada conteniendo proteínas, minerales, vitaminas, hortalizas, frutas y verduras que además evitan el estreñimiento.

Se estimulará la hidratación, bebiendo una cantidad suficiente de líquidos.

Prevenir es cuidar: la importancia del entorno

Las condiciones ambientales en la estancia también son importantes: se debe mantener una temperatura y humedad adecuadas, así como una correcta ventilación e iluminación y evitar ruidos. Todo esto contribuirá a crear un entorno propicio para el paciente y ayuda a mejorar su calidad de vida.

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